Dentro de la ley todo, fuera de la ley siempre conflicto
Una vez mas vemos, como aquellos que se ajustan a derecho apoyan las medidas que se toman pensando en el bienestar general, y como quienes se mueven en la informalidad se oponen siempre al progreso de estas medidas. Concretamente, me refiero en esta oportunidad a lo que sucede en el Parque Centenario, donde los manteros se oponen al enrejado del parque. Explicaba esta mañana por radio Mitre el Jefe de Gabinete porteño, que quienes serían los responsables de los disturbios y quienes habrían chocado con la policía para intentar evitar la colocación de las rejas, sería un grupo de manteros, que no tenían autorización para instalarse allí, y con quienes se habría intentado varias veces dialogar pero con resultado negativo;... a punto tal que esta gente habría decidido instalarse a vivir en carpas dentro mismo del parque, y habrían depositado allí un colectivo y varios autos en mal estado a los que usarían como depósito de mercadería. Dejó bien en claro el Jefe de Gabinete que no se trataba de artesanos, sino de comerciantes que ocupaban de manera ilegal el espacio público. Una vez mas vemos como estos manteros se mueven de un lugar a otro, siempre generando conflicto, en lugar de encuadrar sus conductas a lo que dispone la ley. No hay excusas; artesanos y vendedores de libros verbigracia, han acomodado su actividad a lo que exige la autoridad administrativa, y hoy tienen su espacio legal dentro del parque, sin ningún problema. Y paradójicamente, son quienes mas aplauden la medida decidida por el gobierno porteño. Por el contrario, quienes venden mercadería en infracción y optan por manejarse en la informalidad, son quienes siempre están en el foco del conflicto. Pero recuérdese siempre, que para esta impronta de comercio, no alcanza con el voluntarismo de algún vendedor aislado, sino que se requiere de verdaderas organizaciones y de mucho capital. RJ
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